12 Nov Españolerias: La repostería que conquista paladares en Santo Domingo
Al visitar Españolerías, un rincón auténtico de la repostería española en Santo Domingo, me encontré con un lugar que, además de ofrecer postres únicos, es un tributo al amor y la tradición.
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Apenas crucé la puerta, fui recibida cálidamente por su dueño, Antonio López Rodríguez, y su hija, Monika López.
Con cada detalle en el ambiente, los aromas que llenaban el lugar y la presentación de cada postre, me quedó claro que Españolerías es mucho más que una repostería, es un espacio que preserva la esencia y los sabores de España.
Mientras degustaba un trozo de milhojas, un postre que describe como el favorito de sus clientes, tuve el placer de charlar con Antonio para conocer la historia y filosofía detrás de Españolerías.
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Una historia de tradición
Mi primera pregunta para Antonio fue cómo surgió la idea de fundar Españolerías y qué inspiró a su familia a crear una repostería dedicada a la gastronomía española. “Como español, aunque estoy lejos de España, uno lleva su país en el corazón”, comenzó diciéndome.
Antonio me explicó que, aunque en su familia no había tradición en repostería, sí la había en panadería: su abuelo y su padre se habían dedicado a este oficio en su tierra natal. Al parecer, esas raíces panaderas sembraron en él una pasión que floreció en el deseo de independizarse y tener algo propio.
“Comenzamos con algo pequeño, una neverita y algunos postres”, me explicó Antonio. “Fuimos creciendo y hoy nos llena de satisfacción saber que hemos creado algo que no solo aprecian los dominicanos, sino también otros españoles y personas de diferentes países que, al probar nuestros dulces, sienten un pedacito de España”.
Su compromiso con la calidad y el sabor auténtico le han permitido ganarse la confianza y el cariño de sus clientes, quienes regresan por la constancia en el sabor y el detalle de cada postre.
Un menú que transporta al corazón de España
Le pregunté a Antonio cuáles eran los postres que más destacaban en Españolerías y cuáles eran los favoritos de sus clientes. Sin dudarlo, me respondió que el milhojas es el que más demanda tiene. “El milhojas es muy representativo en España, y aquí en Santo Domingo también ha tenido una gran aceptación entre los dominicanos”, me comentó.
Además del milhojas, la repostería ofrece una amplia variedad de dulces tradicionales españoles, como la tarta de Santiago, el brazo gitano, las cañas rellenas y las trufas de distintos sabores.
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“La tarta de Santiago es muy especial para mí”, continuó Antonio. “Es el postre típico de Galicia, y siendo gallego, para mí es un orgullo ofrecerlo aquí”. Esta tarta, no solo es deliciosa, sino que también lleva en sí una tradición y un simbolismo que la hacen única.
Españolerías ofrece una deliciosa selección de postres que van desde clásicos como tres leches, mousse de chocolate, milhojas y cheesecake, hasta especialidades como la tarta de Santiago, brazo gitano, coco al horno y tiramisú.
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También destacan sus desayunos con opciones como los tradicionales churros con chocolate y las tostadas: la catalana, con pan gallego, tomate y jamón serrano, y la segoviana, con queso y mermelada de pimientos y la famosa tortilla.
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Además, incluyen opciones típicas dominicanas. Cada plato captura el auténtico sabor de España, ideal para quienes buscan algo especial en cada bocado.
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A través de sus productos, Antonio y su equipo han encontrado un balance entre la tradición española y los sabores que los dominicanos disfrutan, adaptando ciertas recetas para satisfacer todos los gustos.
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Españolerías: mucho más que postres
Hablando de la esencia de Españolerías, Antonio expresó su agradecimiento hacia República Dominicana, un país que considera su segundo hogar. “Este país nos ha recibido a los españoles con los brazos abiertos, y eso es algo que valoramos mucho”, afirmó.
La combinación de tradición y adaptación es, según Antonio, clave para mantener su repostería. Sin embargo, en un mundo donde las tendencias cambian constantemente, él se mantiene fiel a su estilo, ofreciendo a sus clientes una experiencia auténtica. “Cada detalle es importante para nosotros, desde el sabor hasta la calidad de los ingredientes. El que compra un milhojas hoy encuentra el mismo sabor que tenía hace diez años”, aseguró.
Para Antonio, la calidad es fundamental, y su compromiso con ella es evidente en cada bocado. “Este tipo de negocio requiere mucha dedicación”, explicó. “Mientras más creces, más difícil es mantener la misma calidad. Prefiero quedarme en el mismo lugar y asegurarme de que cada cliente reciba el mejor producto posible”. Además, el personal de Españolerías, muchos de los cuales llevan décadas trabajando con él, son parte fundamental de este compromiso con la excelencia.
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Con cada historia compartida y cada sabor probado, la experiencia en Españolerías me hizo sentir que había viajado a España sin salir de Santo Domingo. Si buscas una experiencia que mezcle tradición, cultura y sabores únicos, Españolerías es un lugar que debes visitar.
Mariangel González
Estudiante de Comunicación Corporativa de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM)